La cirugía protésica de rodilla es la principal intervención ortopédica que se realiza en Canarias, superando en una proporción de 3 a 1, a las cirugías para implantar prótesis de cadera. El Dr. José Luis País, traumatólogo de CECOTEN, adscrito a la Plataforma THIS, aclara además, que “le siguen en frecuencia la de hombro y ya muy alejadas otras como la de tobillo”. El especialista considera que “la tendencia general de realizar mas implantes de rodilla ocurre en todas partes, auque es evidente particularmente en Canarias. Este predominio de la artrosis de rodilla podría deberse al sobrepeso de la población, a la orografía del terreno y a la dedicación fundamentalmente agrícola de las personas de mayor edad que operamos ahora, aunque todo esto no deja de ser una hipótesis”.
¿En qué consiste la cirugía de prótesis de rodilla?
La Prótesis Total de Rodilla consiste en sustituir las superficies articulares del fémur y de la tibia en la rodilla que están deterioradas por la artrosis. Este deterioro produce dolor y limitación de la función. El Dr. País explica que “se aborda la rodilla por la cara anterior, se realizan los cortes del hueso con una guías específicas para colocar en la posición correcta los implantes y tras las pruebas con implantes provisionales se colocan los implantes definitivos que se suelen fijar con cemento al hueso”. Posteriormente se interviene para detener y prevenir el sangrado y se cierra la herida.
El experto aclara que la cirugía de prótesis se realiza cuando el resto de tratamientos han fracasado. “Se acude a la operación cuando han fracasado las terapias conservadoras o cuando el deterioro de la articulación está tan avanzado que la única opción es la sustitución articular por una Prótesis”. Como novedades en este tipo de cirugías hay que resaltar que los implantes experimentan mejoras de forma permanente, “con el objetivo de que reproduzcan de la forma más parecida la función de articulación primitiva y además los materiales son cada vez más especiales, para conseguir una duración más prolongada”, explica el doctor.
Estos implantes se realizan más frecuentemente en personas de avanzada edad, pero también se implantan prótesis de rodilla y cadera en pacientes jóvenes que han padecido en la infancia o adolescencia alguna enfermedad que ha deteriorado su cadera, o han sufrido una traumatismo o lesiones deportivas.
Avance hacia técnicas cada vez menos invasivas
La cirugía de prótesis avanza hacia la utilización de técnicas cada vez menos invasivas y agresivas. “La intención es respetar, en la medida de lo posible, las inserciones musculares para conseguir una pronta recuperación. Son claros ejemplos de esto el abordaje anterior de cadera y los miniabordajes para la rodilla. Es un plan quirúrgico que respeta las inserciones musculares y aborda la zona articular sin desinsertar los músculos próximos a la articulación, esto tiene unos beneficios claros, pues facilita la recuperación rápida del paciente que puede iniciar la deambulación de forma inmediata y además evita en un porcentaje no desdeñable la luxación de la prótesis, que es una de las complicaciones, especialmente en la cadera”.
Un tercer aspecto de reciente implantación, es la implicación del paciente en su recuperación, “el entrenamiento y la preparación del paciente para la cirugía. Los programas de “Fast Track” o “Recuperación Rápida” donde todo el equipo (cirujanos, anestesistas, enfermeras, rehabilitadores y fisioterapeutas) modifican algunos aspectos de la cirugía para conseguir que el paciente a las pocas horas de la cirugía comience a caminar y a realizar su rehabilitación” informa el Dr. País. Para conseguir este objetivo hace falta modificaciones en la técnica quirúrgica, en la anestesia, en el manejo del dolor, en el tratamiento rehabilitador previo y por supuesto en la implicación del paciente y su familia para conseguir una rápida recuperación. “Cuanto antes comience a andar el paciente, antes se recuperará”.
En el caso de los pacientes a los que se les ha implantado una prótesis de rodilla, su recuperación puede ser muy rápida. El postoperatorio inmediato de una Prótesis de Rodilla exige una estancia de unas 6 a 12 h en una Unidad de Cuidados Semintensivos o una Unidad de Recuperación de Quirófano para control del dolor y del sangrado. A partir de las 12-24 horas se puede iniciar la rehabilitación y la carga sobre la rodilla operada con ayuda de unas muletas o andadora. Durante la estancia en el Hospital el o la paciente realiza tratamiento rehabilitador asistido por un fisioterapeuta, pero además se le indican unos ejercicios para hacer en su habitación y sobre todo se recomienda deambular.
¿Necesitas más información sobre la cirugía de prótesis de rodilla? Haz clic aquí.