Generalmente conocemos que las alergias se pueden diagnosticar mediante pruebas cutáneas en el antebrazo, sin embargo también existen otras formas para realizar este diagnóstico, entre las que destaca el análisis de sangre IgE.
¿Por qué se analiza el igE (Inmunoglobulina E)? Todas las personas tenemos IgE en nuestro organismo, la diferencia radica en que las personas alérgicas tienen los niveles de IgE muy elevados.
Esto se debe a que cuando el organismo se protege de un alérgeno produce anticuerpos IgE. Éstos, generalmente, están localizados en la piel, las membranas mucosas y los pulmones. Aún así, tener estos anticuerpos elevados no quiere decir siempre que se tenga alergia.
Qué debes saber de las alergias
Las alergias son la respuesta del organismo ante la presencia de alérgenos, es decir, de sustancias que, normalmente, son inofensivas (ácaros, alimentos, polen…).
A día de hoy se estima que un 25% de la población sufre alguna enfermedad de origen alérgico, como puede ser el asma bronquial, la rinitis, la urticaria aguda… La incidencia de la alergia irá en aumento en los próximos 20 años, tal y como apuntan los expertos, que calculan que llegará a afectar al 50% de los europeos y al 30% de la población española.
Cómo se desencadena la alergia
La reacción alérgica viene mediada por la Inmunoglobulina E, que se desencadena cuando el cuerpo identifica como nocivas determinadas sustancias y se defiende antes las mismas liberando sustancias inflamatorias, como la histamina. Ésta afecta a los tejidos del cuerpo y es así cómo aparece la sintomatología propia de la enfermedad alérgica.
Los síntomas más frecuentes de la alergia
Quienes padecen alergias reconocerán rápidamente estos síntomas, ya que son los más frecuentes. Entre los cutáneos destacan los picores, eritemas, eccemas… También hay síntomas digestivos como los vómitos, náuseas, diarrea o dolor de estómago.
Además, la alergia producen el incremento de otras patologías habituales como son el asma, la rinitis, la anafilaxia o la urticaria.
Los alérgenos más comunes
Los alérgenos que se transportan por el aire y son inhalados son los que más alergias producen. También son frecuentes aquellos causados por los ácaros del polvo doméstico. Dentro del hogar el pelo y la saliva de las mascotas son otro de los alérgenos habituales.
Los alimentos producen el 90% de las reacciones alérgicas. Los alimentos alérgenos más comunes son ocho: el huevo, la leche, el pescado, los frutos secos, los cacahuetes, los crustáceos, la soja y el trigo.
Además de éstos, existen muchos otros tipos de alérgenos entre los que podemos destacar los farmacológicos, los relacionados con la actividad laboral, causados por los insectos…
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